Conversamos con Hugo Parodi, jefe de obra y representante técnico del tramo civil del proyecto de tendido subterráneo en media tensión que se ejecuta para EPEC. Una obra de infraestructura energética silenciosa, pero estratégica.
La instalación de alimentadores y distribuidores subterráneos de 13.200 voltios ya está en marcha en Bell Ville y Marcos Juárez. El trabajo es llevado adelante por la UTE conformada por las firmas Estructuras – ITEM, EI ICCSA y el Consorcio de Cooperación, bajo contrato con la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC).
Qué se está haciendo y para qué
“La obra consiste en la instalación de dos alimentadores subterráneos que parten desde la estación transformadora ubicada en Paraguay y Saavedra, hasta el punto donde se construirá un nuevo centro de distribución, cerca de la planta de cloaca, en el sector norte”, explica Hugo Parodi.
Aunque ese nuevo centro de distribución no forma parte de esta etapa, el tendido eléctrico llegará hasta allí. A su vez, desde ese punto, se instalarán los cables para cuatro distribuidores también subterráneos, que abastecerán la zona norte, entre la planta de cloacas y la Ruta 9.
Además, se ejecutará otro distribuidor que partirá directamente desde la estación transformadora hasta la intersección de las calles Santiago del Estero y Lardizábal.
Más de 28.000 metros de cables subterráneos
Los números del proyecto dan una idea de su magnitud: se están zanjeando cerca de 8.000 metros, por los que pasarán dos ternas —grupos de tres cables— lo que equivale a unos 28.000 metros de tendido en total.
Parodi también detalló que, para evitar cortes de calzada, en los cruces se colocaron previamente caños que permiten hacer el cableado desde las veredas. “En los sectores pavimentados con asfalto se realizan túneles, como pidió la municipalidad, para no romper la calle”, agregó.
Debido al nivel alto de las napas, no es posible usar la tuneladora en tramos largos. Por eso, se abren ventanas intermedias que permiten trabajar en segmentos más cortos, lo que garantiza mayor precisión. Una vez finalizado el trabajo, todo se repone y deja en condiciones originales.
Infraestructura que mejora la calidad del servicio
Este tipo de obras no siempre se ve, pero se siente: mejoran la confiabilidad y capacidad del sistema eléctrico. La infraestructura subterránea reduce riesgos, evita interrupciones por fenómenos climáticos y amplía la cobertura para zonas urbanas en expansión.
En definitiva, un paso importante hacia un servicio más moderno y seguro para las comunidades de Bell Ville y Marcos Juárez.
